Las extracciones dentales son vitales para:
Retira dientes que no pueden ser salvados con otros tratamientos.
Evita la propagación de infecciones a otros dientes y tejidos bucales.
Alivia el dolor causado por dientes dañados o infectados.
Crea el espacio necesario para ortodoncia u otros procedimientos dentales.
Tecnología avanzada: Utilizamos técnicas modernas y equipos avanzados para asegurar extracciones precisas y sin dolor.
Atención personalizada: Cada procedimiento se adapta a tus necesidades específicas, asegurando una recuperación rápida y sin complicaciones.
Entorno acogedor: Disfruta de un ambiente relajado y amigable durante tu visita.
Salud bucal mejorada: Elimina focos de infección y dolor.
Prevención de problemas futuros: Evita complicaciones que podrían afectar a otros dientes y tejidos.
Cuidado integral: Recibe instrucciones personalizadas para una recuperación rápida y sin complicaciones.
Cuando tienes un diente severamente dañado, infectado o que causa problemas en tu boca. Tu dentista te lo indicará durante tus chequeos regulares.
No, se utiliza anestesia local para evitar molestias durante el procedimiento. Después, puedes experimentar algo de incomodidad, que se maneja con analgésicos.
La recuperación inicial suele durar unos pocos días, aunque la cicatrización completa puede tardar un par de semanas.
Sigue las instrucciones de tu dentista, que pueden incluir evitar alimentos duros, no fumar, y mantener una buena higiene bucal.